El decreto 135 origina malestar en el comercio.

Desde el anuncio del decreto municipal 135/2020 que prohíbe el ingreso de transportistas, distribuidores y viajantes de productos alimenticios y no alimenticios que lleguen de otras ciudades y no cuenten con un local exclusivo o punto fijo de distribución propio o de tercero en el cual descarguen la mercadería, largas colas se formaron durante lunes martes y miércoles en el palacio municipal.

Muchos comerciantes de la ciudad comentaron sus descontento por lo engorroso del trámite, además de la imposibilidad que varios proveedores no pudieron ingresar a 25 de Mayo. Los involucrados mostraron su enojo porque la comunicación no se hizo con tiempo suficiente para prevenir tantos contratiempos. Supo este medio que hubo discusiones y reproches en los retenes ubicados en los dos accesos principales a la ciudad.

También, vecinos que suelen viajar por sus propios medios a Capital Federal, La Plata o Gran Buenos Aires en busca de insumos, fueron demorados a su regreso y tuvieron dificultades para el ingreso.